Un colaborador acostumbrado a estar controlado y a que le supervisen cada paso que da, que de pronto su jefe mantenga las distancias y le ignore durante uno o dos días, lo consideraría un auténtico milagro. “Demasiado bueno para ser verdad. ¡Por fin un poco de autonomía y libertad!”, pensaría. Sin embargo, esta situación a la que algunos darían la bienvenida, otros la viven con angustia y preocupación. Es, por
La entrada Cuando el problema eres tú: el jefe ausente aparece primero en el blog del Mando Intermedio.